En unos de los tantos viajes que realizamos por nuestro país conocimos Banda Florida. Nos cautivó su imagen pueblerina, la sencillez de las costumbres de su gente, su cultura y buen trato con los visitantes. Todo ello enmarcado en paisajes imborrables, refugio de gran cantidad de vestigios de las culturas precolombinas.
Inmediatamente quisimos afincar nuestros sueños en este paraje tan particular del Oeste Riojano. Adquirimos una finca de 3 ha con monte nativo de chañares, tuscas, jarillas y algarrobos, y debajo de este descubrimos los restos de una viña, con sus postes y alambres intactos y una vieja tapera de adobe semi-destruida, que otrora sirvió de hogar a muchas familias humildes de la zona.
Allí pensamos en generar un pequeño polo turístico ofreciendo lotes para la construcción de complejos de cabañas u hospedajes, aprovechando la cercanía de un hospedaje rural existente. Y también comenzamos con la construcción de dos cabañas.